jueves, 13 de febrero de 2025

TRUMP QUIERE “SALVAR” AL MUNDO

 

TRUMP QUIERE “SALVAR” AL MUNDO

EDUARDO ORTIZ RAMÍREZ

 


Claro, no es cualquier cosa ser Presidente de EE.UU. De todas maneras, dos dudas preliminares lo agobian a uno. La primera es cómo los pueblos, en su acepción amplia, eligen a determinados Presidentes. Pasa en América, pasa en Europa y en todos los continentes y naciones. Y, en segundo lugar Trump, ¿quiere salvar al mundo o dominarlo?; como se puede desprender de algunas de sus menos democráticas y libertarias declaraciones para este último caso.

Como siempre pasa, la economía es muy importante para las naciones poderosas. Y entonces “o producen aquí o les ponemos aranceles”. El caso más dramático son las amenazas a Canadá y México, con quienes donde la nación en cuestión tiene un Acuerdo de Libre Comercio  desde inicios de los noventa y el cual ya vapor su segunda  “edición”, por decirlo de alguna manera. Otro caso son la amenazas a los pragmáticos Chinos. Pero, en fin, Rodrik lo planteó acertadamente en un artículo reciente[1].

Otros asuntos son las ideas expansionistas hacia territorios o litigios conocidos, según los casos. Lo primero es sobre Groenlandia, aquella isla receptora de Vikingos hace más de 1.000 años. O el caso trajinado del Canal de Panamá. Hay que recordar que el sentido estratégico de protección de los EE.UU.  cómo en la mayoría de las naciones poderosas, es inagotable. Veamos el mundo: quieran los EE.UU. atender o no a Puerto Rico tienen el Centro del Caribe. Caramba, Caramba…, como les pasa igual con Hawái en el centro  del Pacífico.

Pero hay más. Su propio territorio, ambicionado en muchas y permanentes ocasiones recientes por migrantes (hay que recordar que EE.UU. tiene su origen en olas y olas de migrantes) se ve afectado hoy día por un rio de migrantes desde el Sur, que ha afectado a la migración permanente y numerosa de mexicanos. Los venezolanos están incluidos allí y no deja de ser llamativo que hoy día hayan pasado a ser especie de estrellas problemáticas por la vía del sentido e inclinación delincuencial que tienen integrantes de grupos vinculados a lo mismo y, sobre los cuales, se adjudican responsabilidades desde distintos lados. La pregunta es; ¿y los grupos delincuenciales grandemente e históricamente estructurados en EE.UU. ya no existen?  Debe tener la insistencia indudablemente, algún grado de aprovechamiento político, por que quien conozca la realidad y la historia de ese país, debe saber de qué se trata lo que señalamos.

 Por último, -y alguna de las cosas más recientes-, en la línea de los haberes de dos administradores de países grandes y peculiares en el mundo,  como son EE.UU. y Rusia, pareciera han expresado intereses recientes en que se acabe la guerra de casi tres años en Ucrania -y que los Rusos iban a terminar en breve tiempo-. Informaciones preliminares tratan de señalar intereses rusos para las condiciones del finiquito. Detrás de todo esto lo que si sabemos, más allá de culpas y contra culpas, es que los Ucranianos  siempre se han querido independizar, pero sobre todo que, en la guerra reciente, hombres y mujeres ucranianas lo han puesto todo en la misma.

¡Qué fácil las potencias y los presidentes, hablan de asuntos del mundo!

 

13 de febrero 2025

@eortizramirez

eortizramirez@gmail.com

viernes, 7 de febrero de 2025

Estado, renta y desarrollo en Venezuela II


https://ultimasnoticias.com.ve/noticias/opinion/estado-renta-y-desarrollo-en-venezuela-ii/


Estado, renta y desarrollo en Venezuela II






En el artículo anterior, analizamos la importancia de las categorías conceptuales para comprender la economía venezolana. Hoy, profundizaremos en un aspecto clave: la distribución de la renta petrolera. Explorar cómo el Estado venezolano, a través de sus políticas, ha influido en la distribución de esta riqueza entre los diferentes sectores de la sociedad y cómo impacta en el desarrollo económico del país, es una discusión de plena vigencia.

Una revisión de los planteamientos de Diego Bautista Urbaneja, reflejados en su obra La renta y el reclamo. Ensayo sobre petróleo y economía política en Venezuela, permite observar la introducción de un concepto clave para entender la relación de Venezuela con su principal recurso natural: el petróleo. Este concepto es el de conciencia rentística.
En sus palabras, la conciencia rentística es una forma de pensar y actuar que se centra casi exclusivamente en la renta petrolera, dejando de lado otras actividades económicas y formas de generar riqueza. Se trata de una mentalidad que condiciona la vida social, política y económica de un país, moldeando las expectativas y las decisiones de sus ciudadanos.

La economía política de Venezuela se construye alrededor de la renta petrolera. Con el tiempo, esta renta se convierte en un objeto de disputa entre los diferentes sectores sociales, que presionan al Estado para obtener una mayor porción de ella.
La llegada de Chávez al poder en 1999 puso en cuestión un modelo de gestión de la renta petrolera centrado en los intereses de una élite económica y política. El nuevo gobierno, al proponer una distribución más equitativa de la riqueza petrolera y un mayor control estatal sobre el sector, generó una fuerte resistencia por parte de los sectores tradicionales de poder, especialmente aquellos vinculados a Pdvsa. El intento de golpe de Estado de 2002 fue el resultado de esta pugna por redefinir el papel del Estado y la sociedad en la gestión de un recurso estratégico para el país.

Ello comprueba una verdad impoluta: la inercia cultural asociada a la renta petrolera no puede ser superada de manera inmediata. Es necesario diseñar una estrategia de largo plazo que articule políticas públicas en diversos ámbitos (económico, político, social, educativo), con el fin de promover una cultura productiva diversa y una distribución equitativa de la riqueza.

Córdova Zerpa Elio

jueves, 6 de febrero de 2025

How Not to Respond to Trump’s Tariffs

 

https://www.project-syndicate.org/commentary/trump-tariffs-how-to-respond-by-dani-rodrik-2025-02

How Not to Respond to Trump’s Tariffs

Feb 6, 2025DANI RODRIK

Everyone knows that a schoolyard bully must be met with determined opposition if he is to be deterred. But when it comes to Donald Trump’s deranged trade tariffs, the best response is to remain calm, back away, and let the bully keep punching himself.

CAMBRIDGE – By wielding the threat of imposing across-the-board tariffs against Canada, Mexico, and China for no justifiable reason, US President Donald Trump has demonstrated that he is a major risk for America and its trade partners. But how other countries respond to Trump’s reckless policies will ultimately determine how much damage the global economy will sustain. America’s trade partners need to keep their cool and resist the temptation to magnify the insanity.

Most analysts seem to believe that responding in kind is the right thing to do. As expected, Canada and Mexico both threatened retaliation and eventually reached deals with Trump to avert the tariffs temporarily. But it is not clear why retaliation should be regarded as normal and desirable when the tariffs that trigger them are viewed (correctly) as crazy. Policymakers elsewhere must not lose sight of the truth that Trump has chosen to disregard: the costs of tariffs are borne mainly at home.

The instinct to retaliate is natural. To deter a schoolyard bully, one must confront him with determined opposition. But far from dissuading Trump, other countries’ tariffs will further feed his misplaced grievances. More importantly, the logic of retaliation fails in this instance. The tit-for-tat model works to ensure cooperation in certain circumstances, such as the prisoners’ dilemma. In this scenario, each actor benefits from their own unilateral move, but is made worse off when the other actor responds in kind. Trump’s tariffs do not fit this characterization.

Contrary to what Trump claims, US tariffs are paid mostly by American consumers and firms that use imported inputs. Thus, the “optimum tariff” argument by which a country could gain by exercising monopoly power on world markets does not seem to apply. Selective trade protection can occasionally play a positive role as part of a broader agenda for development or greener growth. But across-the-board tariffs hurt the US economy, and more so than they do other economies. Trump’s America is a prisoner entirely of its own making.

Principio del formulario

Final del formulario

Likewise, retaliatory tariffs imposed by Canada and Mexico would mainly harm their own economies. As smaller players in world trade, they have even less ability to pass the costs of tariffs on to the United States. The presence of supply chains in North American trade (as in auto manufacturing) magnifies the costs of disruption, but does not alter the fact that the costs of import tariffs are essentially domestic. In the language of game theory, retaliation through import tariffs is not a “best response.”

Returning to the schoolyard bully analogy, imagine that you face an aggressor who is attacking you for no good reason. He seems mad, hitting himself with each wild swing of his arm. What should you do? You could respond in kind and mimic what he is doing, but that would be equally mad, since you would be hurting yourself even more in the process. The best strategy, then, is to minimize the damage by staying as far from the bully as you can and waiting for him to punch himself out and crumple in a corner.

To be sure, Canada, Mexico, China, and other countries that will bear the brunt of Trump’s trade actions do not have the luxury of insulating themselves from the US. They will feel some pain for sure. But they should not make things worse for themselves by “pulling a Trump” on their own economies. Some surgical retaliation against industries that support Trump politically may be unavoidable for domestic political reasons. But common sense and moderation should prevail, for the sake of their own countries and the global economy on which they depend.

Some worry that Trump might feel vindicated if others do not mount a strong response. But the surest way to put him in his place is to downplay his threats and treat him as weak. The most effective message America’s trade partners can give Trump is: “You are free to destroy your own economy; we do not plan to do the same. We will turn instead to other, more reliable trade partners, thank you very much.”

Moreover, America’s trade partners – even the small ones – are not entirely powerless vis-à-vis the US. They have instruments other than trade policy at their disposal. They can, for example, impose profits taxes on domestic subsidiaries of specific American multinational corporations. Gabriel Zucman of the Paris School of Economics has suggested that Canada and Mexico place a wealth tax on Elon Musk and make Tesla’s access to the Canadian market conditional on paying it. This approach has the advantage of potentially generating direct fiscal benefits at home.

In the wake of Trump’s actions, we should worry about the prospects of a calamitous race to the bottom. During the 1930s, a cycle of retaliation sent international trade into a tailspin and exacerbated the global depression. Avoiding such an outcome today is of the utmost importance. The good news is that the worst of the damage can be contained, and the costs will be borne mostly by the US, if others don’t overreact. America’s trade partners should keep calm and carry on.

DANI RODRIK

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Dani Rodrik, Professor of International Political Economy at Harvard Kennedy School, is President of the International Economic Association and the author of Straight Talk on Trade: Ideas for a Sane World Economy (Princeton University Press, 2017).

23 de enero de 1958: 67 años después

 

23 de enero de 1958: 67 años después

Esta fecha, asimismo, me hace robustecer mis valores democráticos. El 23 de enero sucedió, porque se aceleran una serie de eventos y hubo una conjunción de elementos y factores que llevó al colapso de la autocracia militar ese día


 

·         JESÚS E. MAZZEI ALFONZO


30/01/2025 05:00 am




El pasado jueves 23 de enero, se cumplieron 67 años de la gesta de la caída de la última dictadura militar que tuvo el país a lo largo de su traumática historia. En efecto, el 23 de enero se cumplirá pues, un año más de esta fecha histórica, es la reinstauración de la democracia venezolana luego de una década militar, la autocracia pérezjimenista que fue parte de la oleada de los gobiernos militares de derecha que azolaron a América Latina, en ese tiempo que fueron los años 50, tan oscura, llegaba a su feliz término. Llegar aquí costó mucho (en términos de exilio, muertos, costo social, retroceso institucional y democrático) y esperamos que las nuevas generaciones valoren en su justa medida este gran acontecimiento histórico.

Claro que por supuesto, fue un proceso con altibajos y que empezó a cristalizarse en el año 1957, sobre todo luego que, a mediados de ese año, con una conjunción de factores que propiciaron la caída del régimen militar, que se pensaba eterno y sólido. El primer detonante del quiebre de los elementos que le daban apoyo y sustento, fue la posición y acción de la iglesia y la crítica, a la situación social, con la pastoral de Monseñor Arias, y luego, los acontecimientos del plebiscito espurio que se organizó en noviembre de 1957 y el levantamiento militar del 1° de enero de 1958 ( cuestión que se manifestaba en forma concreta, en un descontento al interno de las FF.AA y a la vinculación con algunos líderes políticos de la época, que llevaban a cabo la lucha y resistencia civil).

Lo primero que oí del 23 de enero, fue por mi abuelo materno Agustín Alfonzo Bolaños, además, de mi tío abuelo materno el Dr. Arminio Martínez Niochet, hermano de mi abuela Margarita Martínez Niochet, quien fue uno de los médicos firmantes del manifiesto de los galenos a inicios del año 1958, luego también mi tío Regulo Campo Martínez, en varias conversaciones, realmente gratificantes y la experiencia política de mi padre en aquella época en el exilio, pero que vivió la política desde mediados de los años 40, siendo muy joven es de los fundadores de la AJV, Asociación de Jóvenes de Venezuela, en el estado Trujillo, precursora de la Juventud de AD. Posteriormente a inicios de los años 50, cuando sale al exilio, luego de la clausura de la UCV, donde no puede continuar sus estudios de medicina, él estuvo en varias oportunidades encarcelado en la cárcel del Obispo y nos relataba lo bárbaro de sus diferentes momentos de reclusión.

En ese mismo orden de ideas, mi padre vivió esos acontecimientos en España, donde residía exiliado por la autocracia militar y donde se gradúa de médico en la Universidad de Zaragoza, pero con la expectativa de esa gran colonia de venezolanos que había en aquel entonces en España y que actuaba desde afuera, con la expectativa de regreso al país que lo hace efectivamente en 1959, a los días de acceder a la primera magistratura Don Rómulo Betancourt, apoyado por los partidos COPEI y URD, producto del Pacto de Punto Fijo (pacto de gobernabilidad ejemplar para los actores políticos de hoy y con plena vigencia en los tiempos que corren en la Venezuela contemporánea).

En ese sentido, luego con los años, en mis estudios universitarios de ciencia política en la UCV, entre 1978-1983, mis maestros Andrés Stambouli y Humberto Njaim, entre otros, en un excelente curso de una de las materias obligatorias del sexto semestre sobre el sistema político venezolano y luego durante toda mi trayectoria de la carrera me permitieron valorar y aprimorar aún más, la fecha en su justa dimensión y medida y mi propia experiencia de mi propio ciclo vital, tanto desde el punto de vista profesional y vivencial.

Posteriormente, hoy en día, con la lamentable experiencia chavomadurista, he fortalecido mis creencias, valores y convicciones, en una fecha tan fundamental, para la historia venezolana, el legado del liderazgo de aquella época y lo que resulto de la experiencia de la República Civil (1958-1999) en realizaciones y políticas públicas en contraste al desastre vivido por el país en estos últimos 26 años, con un balance lamentable para el destino de Venezuela, en materia de políticas públicas fallidas y el despilfarro de más de un trillón de dólares durante la década de 2002-2013, que le hubiera posibilitado el definitivo salto al país a la modernidad absoluta y no en un proyecto socialista quebrado y desfasado históricamente. El país se equivocó en 1998, o, mejor dicho, los que votaron por la alternativa marxista-socialista de Hugo Chávez, se equivocaron totalmente.

Esta fecha, asimismo, me hace robustecer mis valores democráticos. El 23 de enero sucedió, porque se aceleran una serie de eventos y hubo una conjunción de elementos y factores (la huelga del día 21, el quiebre del apoyo militar) que llevó al colapso de la autocracia militar ese día. Dos libros aproximaron en una forma más clara como acontecimiento histórico aún más la idea y el conocimiento más exacto de la fecha, uno, del diplomático colombiano que vivió los acontecimientos y que fue testigo clave José Umaña Bernal, y el otro, un texto, de la prestigiosa historiadora Elena Plaza, sobre el 23 de enero, entre otros.

Fueron veintidós días de vértigo, donde hubo escaramuzas de calle, manifiestos abiertos de la sociedad civil de la época (los intelectuales, los médicos, ingenieros, abogados), el rol jugado por el exilio venezolano, la importante reunión de New York, entre Rómulo, Jóvito y Caldera, el rol importante jugado por la Junta Patriótica, quién coordino y condujo el trabajo político desde la clandestinidad a lo largo del año 1957, sobre todo desde mediados de año, el logrado quiebre del consenso militar al interno de la FF.AA, que se nota no más el 1° de enero, con el alzamiento de la Fuerza Aérea y elementos del ejército, con el Coronel Hugo Trejo, a la cabeza, los vaivenes que dio los estertores de la autocracia militar primero con el nombramiento General Rómulo Fernández y luego con su destitución del cargo de Ministro de la Defensa en un proceso no muy claro, pero que manifestaba que había un sector o facción de las FF. AA, que quería mantener el proyecto militar, pero sin Marcos Pérez Jiménez. El rol jugado por la Iglesia y en particular por figuras claves de la época como Monseñor Arias Blanco y el padre Jesús Hernández Chapellín, amigo de mi padre, fueron claves en la caída de la autocracia militar.


El rol jugado por el Contraalmirante Wolfgang Larrazábal, que con sentido de las proporciones, serenidad, tacto e inteligencia condujo el proceso y el papel clave de la Marina el día 22 de enero y el posterior alzamiento de la Escuela Militar y como el resto de los componentes se unen en la jugada que dará al traste con la última dictadura militar en Venezuela. Los acontecimientos que llevaron a como se formó la Junta cívico-militar y como los coroneles Abel Romero Villate, junto Roberto Casanova, fichas del perezjimenismo se quisieron colar en la junta con cierta astucia, pero fueron destituidos rápidamente. Quedó conformada con Wolfgang Larrazábal, los coroneles Luís Araque y Pedro José Quevedo y los civiles Blas Lamberti, en una reorganización de la junta el 18 de mayo la junta incorporó a los Doctores Arturo Sosa hijo y Edgar Sanabria, por los otros civiles, que conformaron la primera junta. Por cierto, el secretario de la junta es Héctor Santaella, que tendrá destacada actuación pública en esos años, entre otras cosas, porque será de los fundadores de la AVEX en 1962, y el político socialcristiano el Dr. Edecio La Riva Araujo como director de secretaria de la Junta.

En el libro de José Umaña, que invito a los jóvenes a leer, está por ejemplo la composición de los dos gabinetes de la época, los gobernadores por entidad federal, y en fin, un texto inolvidable para mí, que trae entre otras cosas el papel de la FF. AA, el rol jugado por la Junta Patriótica, la Iglesia, la Prensa,( hay por cierto un interesante artículo de Gabriel García Márquez, sobre el papel de la iglesia), los distintos manifiestos se pueden leer, los líderes ante la Dictadura, los intelectuales como Arturo Uslar Pietri, Mario Briceño Iragorry, Miguel Otero Silva, Lucila Palacios, entre otros, además como, reseño la prensa extranjera lo eventos de Venezuela están allí para la lectura de los jóvenes, también como fueron esos primeros 180 días de gobierno de la junta, el intento de Golpe de Jesús María Castro León remora del perezjimenismo, están perfectamente reseñados en los libros en cuestión; que recomiendo a los jóvenes leer y en particular el de Umaña. Este es un día no sólo para conmemorar sino para analizarlo y estudiarlo, con la seriedad que merece un evento de esa naturaleza.

En conclusión, un acontecimiento muy importante dentro de la historiografía y política venezolana. Un evento ligado profundamente a la experiencia democrática vivida por el país hasta 1999 y que debe servir no sólo de guía, sino de estudio profundo, por ello, saludo todas las iniciativas de la Academia de Ciencias Políticas, de generar un estudio multidisciplinario desde la ciencia política, la historia, entre otras ramas del saber, un denso estudio sobre esta fecha en particular, una fecha reivindicada, a pesar de los intentos de manipulación por la experiencia marxista del chavomadurismo, primero de ignorarla y luego hacerla suya, algo completamente fuera de todo sentido histórico, porque el chavomadurismo no existía en aquel entonces, eran otras las corrientes ideológicas, las políticas que se discutían, los líderes con auctoritas, con sentido statemanship los partidos, la sociedad y militares extraordinarios en calidad intelectual y liderazgo.

jesusmazzei@gmail.com

 

domingo, 26 de enero de 2025

¿El fin del progreso?

 

https://www.project-syndicate.org/commentary/trump-return-to-power-amounts-to-end-of-progress-by-joseph-e-stiglitz-2025-01/spanish

 

¿El fin del progreso?

Jan 21, 2025JOSEPH E. STIGLITZ

NUEVA YORK – Hace 35 años, el mundo experimentó un cambio de época con el colapso del comunismo europeo. Se sabe que Francis Fukuyama llamó a este momento el “fin de la historia”, prediciendo que todas las sociedades terminarían convergiendo hacia la democracia liberal y las economías de mercado. Hoy en día, es casi un cliché observar lo equivocada que estaba esa predicción. Con el regreso de Donald Trump y su movimiento MAGA, tal vez deberíamos llamar a la era actual el “fin del progreso”

La mayoría de nosotros damos por sentado el progreso. Pero deberíamos recordar que los estándares de vida hace 250 años apenas diferían de los de hace 2.500 años. No fue hasta la Ilustración y la Revolución Industrial cuando logramos las enormes mejoras en cuanto a la esperanza de vida, la salud y los niveles de vida que han definido la modernidad.

Los pensadores de la Ilustración reconocieron que la experimentación científica podía ayudar a las personas a entender a la naturaleza y crear nuevas tecnologías transformadoras, y que las ciencias sociales podían permitir una coordinación más estrecha de los esfuerzos por mejorar las condiciones de todos los miembros de la sociedad. Esos esfuerzos requerían que el estado de derecho desplazara al absolutismo, que el respeto por la verdad prevaleciera sobre el oscurantismo y que se elevara la experiencia en cuanto a los asuntos humanos. Entre los rasgos más inquietantes de la revolución MAGA está su rechazo frontal de estos valores.

¿Puede continuar el progreso? De la misma manera que los soviéticos consiguieron lanzar Sputnik, puede que veamos a Trump y a sus seguidores presidir hazañas tecnológicas notables en el espacio y en inteligencia artificial. ¿Pero podemos realmente esperar que la nueva oligarquía estadounidense supervise avances sostenidos y ampliamente compartidos? Los que están ahora en el poder se sienten motivados absolutamente por la búsqueda de riqueza, y no tienen reservas a la hora de acumularla mediante la explotación y la búsqueda de renta. Ya han demostrado su ingenio a la hora de ejercer el poder de mercado y aprovechar los medios de comunicación y las plataformas tecnológicas para promover sus intereses privados mediante la manipulación y la desinformación generalizadas.

Lo que diferencia a la corrupción norteamericana actual de las formas pasadas es su enorme escala y descaro. La idea de meter billetes de 100 dólares en sobres de papel marrón suena pintoresca comparada con lo que tenemos ahora. Los oligarcas estadounidenses pueden “contribuir” abiertamente con cientos de millones de dólares a la campaña electoral de un político a cambio de favores. El préstamo sin condiciones de 465 millones de dólares que Tesla recibió de la administración del presidente Barack Obama hace 15 años parecerá una miseria en comparación con lo que se avecina.

El progreso requiere inversiones en ciencia básica y una mano de obra calificada. Sin embargo, durante su primer mandato, Trump propuso recortes tan masivos en la financiación de la investigación que incluso sus colegas republicanos se opusieron. ¿Mostrarán la misma disposición a resistirse esta vez?

En cualquier caso, ¿sigue siendo posible el progreso cuando las instituciones responsables del avance y la transmisión del conocimiento son objeto de ataques constantes? Al movimiento MAGA nada le gustaría más que acabar con las instituciones de “élite” donde se produce tanta investigación de vanguardia.

Ningún país puede prosperar verdaderamente si gran parte de la población sufre carencias en educación, salud y alimentación nutritiva. En Estados Unidos, alrededor del 16% de los niños crecen en la pobreza, el desempeño global en las evaluaciones educativas internacionales es mediocre, la malnutrición y la falta de vivienda se han generalizado y la expectativa de vida es la más baja entre las principales economías avanzadas. El único remedio es más y mejor gasto público. Sin embargo, Trump y su equipo de oligarcas están empeñados en recortar el presupuesto todo lo que puedan. Hacerlo dejaría a Estados Unidos aún más dependiente de la mano de obra extranjera. Pero los inmigrantes, incluso los altamente calificados, son un anatema para los seguidores del MAGA de Trump.

Aunque Estados Unidos ha sido durante mucho tiempo líder mundial en el avance de la ciencia y la tecnología básicas, es difícil ver cómo esto puede continuar en un gobierno de Trump. Veo tres escenarios posibles. En el primero, Estados Unidos finalmente acepta sus problemas profundamente arraigados, rechaza el movimiento MAGA y reafirma su compromiso con los valores de la Ilustración. En el segundo, Estados Unidos y China continúan por el camino del capitalismo oligárquico y del capitalismo de estado autoritario, respectivamente, mientras que el resto del mundo queda rezagado. Por último, Estados Unidos y China mantienen su rumbo, pero Europa adopta la bandera del capitalismo progresista y de la socialdemocracia.

Lamentablemente, el segundo escenario es el más probable, lo que significa que debemos considerar cuánto tiempo más se podrán seguir gestionando las crecientes deficiencias de Estados Unidos. China cuenta con enormes ventajas en el desarrollo de tecnología e inteligencia artificial, debido a su enorme mercado, a su amplia oferta de ingenieros y a su compromiso con la planificación a largo plazo y la vigilancia integral. Asimismo, la diplomacia china respecto del 60% de los países no occidentales ha tenido mucho más éxito que la estadounidense. Pero, por supuesto, ni China ni los Estados Unidos de Trump están comprometidos con los valores que han impulsado el progreso desde finales del siglo XVIII.

Trágicamente, la humanidad ya se enfrenta a desafíos existenciales. Los avances tecnológicos nos han dado los medios para destruirnos a nosotros mismos, y la mejor manera de evitarlo es a través del derecho internacional. Además de las amenazas que plantean el cambio climático y las pandemias, ahora también tenemos que preocuparnos por la IA no regulada.

Algunos dirán que, aunque haya una pausa en el progreso, las inversiones pasadas en ciencia básica seguirán dando valiosos frutos. Además, agregarán los optimistas, todas las dictaduras finalmente terminan y la historia continúa. Hace un siglo, el fascismo asoló al mundo. Pero eso condujo a una ola de democratización, en la que movimientos de descolonización y derechos civiles contrarrestaron la discriminación racial, étnica y de género.

El problema es que esos movimientos exitosos solo llegaron hasta cierto punto, y el tiempo no está de nuestro lado. El cambio climático no esperará a que nos decidamos a actuar. ¿Disfrutarán los estadounidenses de un progreso continuado en forma de prosperidad compartida, basada en la educación, la salud, la seguridad, la comunidad y un medio ambiente limpio? Lo dudo. ¿Y el fin del progreso en Estados Unidos tendrá repercusiones a escala mundial? Casi seguro.

Es demasiado pronto para saber cuáles serán las consecuencias de la segunda presidencia de Trump. La historia efectivamente avanza, pero el progreso podría quedar atrás.

Joseph E. Stiglitz

JOSEPH E. STIGLITZ

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Joseph E. Stiglitz, a Nobel laureate in economics and University Professor at Columbia University, is a former chief economist of the World Bank (1997-2000), former chair of the US President’s Council of Economic Advisers, former co-chair of the High-Level Commission on Carbon Prices, and lead author of the 1995 IPCC Climate Assessment. He is Co-Chair of the Independent Commission for the Reform of International Corporate Taxation and the author, most recently, of The Road to Freedom: Economics and the Good Society (W. W. Norton & CompanyAllen Lane, 2024).

 

viernes, 24 de enero de 2025

Estado, renta y desarrollo en Venezuela

 https://ultimasnoticias.com.ve/noticias/opinion/estado-renta-y-desarrollo-en-venezuela/


Estado, renta y desarrollo en Venezuela


La Teoría económica del capitalismo rentístico de Batista representa un hito en el estudio de la economía venezolana, al ofrecer un análisis estructural que trasciende las explicaciones coyunturales. Su enfoque, arraigado en la tradición de la economía política clásica, permite comprender cómo la dependencia de la renta petrolera ha moldeado las instituciones, las relaciones sociales y las trayectorias de desarrollo del país.

La distribución de la riqueza en el capitalismo es un proceso inherentemente desigual, moldeado por las relaciones de producción. Los ingresos, en forma de salarios, beneficios y rentas, son el resultado de la apropiación de la plusvalía generada por el trabajo. Esta dinámica, revelada por Marx, evidencia cómo la propiedad privada institucionaliza un conflicto fundamental: la riqueza producida colectivamente se concentra en manos de una minoría, mientras la mayoría obtiene una porción significativamente menor.

Con el objetivo de desentrañar la naturaleza del capitalismo rentista, Batista introduce una categorización analítica que distingue entre medios de producción originados en procesos productivos (como las fábricas) y aquellos que son dados por la naturaleza (como el petróleo). Esta dicotomía resulta crucial para comprender las distintas formas de apropiación y explotación en este sistema económico.

La Constitución Bolivariana establece de manera clara que el petróleo es propiedad del Estado. En consecuencia, la renta petrolera, fruto de la explotación de este recurso, es un ingreso destinado a financiar las políticas públicas. Sin embargo, la forma en que se distribuye esta renta ha variado significativamente a lo largo de la historia, por ejemplo, durante el puntofijismo, la renta petrolera se destinó principalmente a fortalecer a una oligarquía, mientras que durante el gobierno de Hugo Chávez se buscó una distribución más equitativa a través de misiones sociales y programas de inversión social.

La principal riqueza del conocimiento radica en su aplicación práctica para favorecer los procesos de desarrollo en la sociedad. Una correcta conceptualización de la realidad económica venezolana es fundamental para diseñar políticas públicas efectivas que transformen el modelo rentista. Superar el capitalismo rentista demanda una comprensión profunda y actualizada de este fenómeno, así como la disposición a abandonar esquemas conceptuales rígidos que impiden avanzar hacia un nuevo modelo de desarrollo.

LA EVOLUCIÓN MUNDIAL A PESAR DE DAVOS.

LA EVOLUCIÓN MUNDIAL A PESAR DE  DAVOS.

EDUARDO ORTIZ RAMÍREZ

 


Las mejores intenciones, los mejores analistas, los personajes más conspicuos -o en cierta proporción- pueden
 brindar su presencia en la reunión internacional, directamente o con los medios tecnológicos actuales, pero el mundo y  sus problemas siguen su propia dinámica, en el plano político, económico  y militar, sin salir de allí mayores soluciones.

 A inicios de los años noventa, ya se sabía que la profesora Joan Robinson, había señalado que aquella insistencia en años y lustros en curso, en las ideas de aperturismo y Libre Comercio, la hacían sospechar que pudieran presentarse nuevas formas de Mercantilismo, que los entendidos saben que representó en el mundo. No en balde ya se venía desarrollando, queremos recordar, el nuevo proteccionismo, que representaba, entre otras cosas, apoyo a las exportaciones y restricción en las importaciones, sobre todo en las economías más fuertes. Impresionante oír hoy día al Presidente Trump amenazar con aranceles a Canadá y a México, a pesar del TLCAN/hoy T-MEC. O señalarle incluso a los fuertes económicamente, que o se ubican en el espacio productivo estadounidense o paguen aranceles.

De igual manera, se conoce la crisis que atraviesa el multilateralismo, elemento fundamental de la dinámica del Comercio internacional, aun con el permanente entusiasmo que brinda el organismo del caso, como es la OMC. A pesar de esto último no se pueden borrar las marchas, contramarchas, optimismos y frustraciones  desde 2001, cuando inicio  la Ronda a Doha, que ya ha sido marcada como fracaso.

 Igual que esto último es una dinámica de presencia e influencia en el mundo, lo es el ámbito militar y de guerras como la de la Guerra en la Franja de gaza o la de Rusia/Ucrania con registros de más de dos años, o lo puede representar la ambición del Nuevo Gobierno de los EE.UU. de reapropiarse el Canal de Panamá o traer a su lado Groenlandia, por razones estrategia, o las consideraciones relativas al Golfo de México. Cualquier país fuerte, puede inventar sus estrategias, pues. No hay que olvidar que EE.UU. tiene a Puerto Rico en el centro del Caribe y a Hawái en el centro del Pacifico.

 A inicios de los noventa, estaban ya claramente formados Bloques económicos para Europa, América del Norte y otras regiones. Ello apuntaló una perspectiva regionalista para los poderosos económicamente, quienes siguen determinando el rumbo económico de la humanidad, incluso aun considerando la incorporación de China  a estos últimos. Desde tales tiempos se busca y no siempre con éxito, impulsar el llamado Regionalismo Abierto. Por otra parte, algunos países buscan desesperadamente ser incorporados a los  Bloques de estos últimos países, desatendiendo incluso a la propia posibilidad de desarrollar acuerdos con pares cercanos o similares. Por lo demás ante el alto enjambre de Acuerdos Comerciales, con experiencias fallidas o exitosas, o las amenazas que acostumbran a lanzar las economías más fuertes, hay innumerables caminos de deterioro del multilateralismo  y las mismas propuestas de integración económica a pesar de la afirmación de la Directora de OMC en Davos[1], de que el comercio mundial no depende solo de la Política Comercial de EE.UU.

El Cambio climático sigue profundizándose en líneas de clara amenaza, varias guerras están en las puertas de algunos países y los virus ya dieron una muestra de lo que pueden hacer,  y no deja de haber temor por lo que pueda venir del espacio.

En fin, Davos tiene sus partes buenas, pero se repite y se repite y el mundo sigue avanzando y no siempre para bien.

 

24 de enero de 2025

@eortizramirez

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[1]https://forbes.co/2025/01/23/economia-y-finanzas/cuaderno-de-davos-dia-4-milei-en-persona-y-trump-en-remoto-acaparan-la-atencion.