Juan Carlos Rey: a un año de su
partida
El profesor Juan Carlos Rey Martínez, en uno de sus últimos brillantes
trabajos, investigó sobre los tres modelos de Democracia en Venezuela durante
el siglo XX y XXI.-
JESÚS E. MAZZEI ALFONZO
28/10/2021 05:00 am
El Dr. Juan Carlos Rey, será parte integrante del Instituto de Estudios Políticos desde su fundación primero como auxiliar de investigación y luego como investigador al graduarse de abogado en la UCV en los años 60. Será pieza de la primera generación de investigadores del mencionado centro académico y cursará el primer curso de ciencias políticas, para formar a los futuros investigadores de planta, además, que será parte de de la Comisión que estudiará la factibilidad de crear una Escuela de Estudios Políticos que se nombra en 1968, como su Secretario y será componente fundamental para suministrar criterios académicos y administrativos, para la nueva estructura académica que iniciará su andadura en enero 1973 y por si fuera poco, será también, uno de los profesores fundadores de la Escuela de Estudios Políticos de la UCV, a la cual le dio lustre como docente. Tuve el privilegio y honor, de ser uno de sus discípulos en el año de 1982, en un curso monográfico, sobre el tema de la Introducción al Estudio del Poder. A un año de su partida deseo homenajearlo como prueba que su obra académica perdura, con uno de sus últimos trabajos, sobre los Tres modelos de Democracia.
Así las cosas, discípulo
directo del fundador de la Ciencia Política en Venezuela, el maestro Manuel
García-Pelayo en el Instituto de Estudios Políticos de la UCV, forma parte de
la primera cohorte de investigadores que se integrará al mencionado centro de
investigación. Al momento que se funda la escuela de Estudios Políticos Juan
Carlos Rey dictará varias materias entre las que cabe mencionar a Teoría
Política, Sistema Político Venezolano entre otras, además, de haber iniciado
una importante labor investigativa y de publicación en el Instituto, desde el
año de 1962, con lo cual inicia una importante obra de trabajos académicos
fundamentales para el desarrollo intelectual de la ciencia política venezolana
en sus inicios. (El Sistema de Partidos en Venezuela, Poder Espiritual y
Auctoritas en el Pensamiento Marxista, Introducción a la Teoría de los Sistemas
Generales, Dos principios de explicación en El Capital, entre otros).
El profesor Juan Carlos Rey
Martínez, en uno de sus últimos brillantes trabajos, investigó sobre los tres
modelos de Democracia en Venezuela durante el siglo XX y XXI, demostró lo
actualizado y lúcido, que se encontraba nuestro apreciado y recordado maestro.
Así las cosas, en el texto tres modelo democráticos Rey,
plantea que” Si comparamos los tres sistemas políticos que podemos calificar
como democráticos, que ha habido en Venezuela en el siglo XX, —a los que
enseguida tendremos que añadir algún adjetivo, para precisar el tipo de
democracia de la que se trata—, vemos que dos de ellos, el del “trienio adeco”
(1945-48), y el “chavismo-madurismo” que se instaura a partir de 1999, aunque
en muchos aspectos son muy diferentes, responden a un modelo de democracia
mayoritaria, en el que el gobernante era exclusivamente el que había
obtenido la mayoría de votos en las elecciones, y se relegaba o excluía del
gobierno a las minorías. En cambio el sistema político que existió entre 1958 y
1999, respondía a un modelo que se suele llamar democracia consensual o
pactista, en el cual las decisiones públicas importantes, no podían ser el
resultado de aplicar el principio o regla de la mayoría, sino que debían contar
con la aprobación de diversos grupos políticos y sociales, aunque fueran
minoritarios.
Mediante este nuevo sistema,
que se estableció en Venezuela a partir de 1958, se pretendía superar las
deficiencias que mostró la “democracia mayoritaria” del trienio 1945-48, que se
caracterizó por ser sectaria y excluyente con las minorías que no pertenecían
al partido hegemónico (AD), lo cual fue en gran parte la causa del fracaso del
intento de implantar la primera democracia de masas en el país, que resultó
inviable, de modo que el gobierno de Rómulo Gallegos, pese a haber contado con
una amplia mayoría electoral, sucumbió sin apenas resistencia, ante un golpe
militar que contó con el apoyo o la aceptación de lo partidos de la oposición y
de importantes fuerzas sociales y económicas, numéricamente minoritarias, pero
poderosas, que veían amenazados por el gobierno de AD no solo sus intereses. En
cuanto al “chavismo-madurismo”, se implantó como un rechazo expreso y frontal
al “puntofijismo” o “pactismo”, es decir a la democracia consensual anterior,
pero también como una recusación de la democracia representativa, frente a la
cual impuso una democracia mayoritaria, sin pluralismo político ni social, y
con rechazo de los componentes necesarios para una “democracia formal”, a la
que acusaba de ser una falsa democracia...”. Hoy hegemónico, sectario y
excluyente, sin lugar a dudas.
De esta manera, fue estimulante y me siento orgulloso de haber cultivado el
afecto y cariño del profesor Juan Carlos Rey, como parte de uno de sus
discípulos que tuvimos la suerte de contar con su magisterio como docente e
investigador, el cual aportó ideas novedosas a la modernización de la ciencia
política venezolana.
jesusmazzei@gmail.com
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