Tomado de www.ultimasnoticias.com.ve
Guillermo Ortega
La lista es larga y los problemas
son si se quiere bastante intuitivos, no es necesario repasar lecciones de
teoría del crecimiento para comprender que crecer de forma sostenida involucra
un tremendo esfuerzo y mucha disciplina colectiva
Opinión 9
octubre 2016
¿Qué necesita la economía
venezolana para generar bienestar para sus habitantes? ¿Mejores oportunidades
para generaciones por venir? e ¿Incorporar a esos sectores marginados
por varias décadas? Un ejercicio simple, requeriría tasas de
crecimiento sostenidas alrededor del 5%, hacerlo por varias
décadas consecutivas, en definitiva un enorme requisito de acumulación de
capital tanto físico como humano. No cabe duda que existe el potencial para
hacerlo, pero de allí a lograrlo hay una enorme diferencia. La experiencia
reciente, el ciclo que comenzó en 2004 nos enseña varias lecciones. En realidad
nos repite algunas que ya hemos debido haber aprendido. Son muchas las cosas
que habría que hacer. Hay temas centrales que tienen que ver con
formación de capital humano, destrezas educativas pero también asuntos
relacionados a salud y seguridad, temas que competen al Estado y al
sector privado. Otros temas que tienen que ver con la formación de capital
físico, el uso eficiente de recursos. La lista es larga y los problemas
son si se quiere bastante intuitivos, no es necesario repasar lecciones de
teoría del crecimiento para comprender que crecer de forma sostenida involucra
un tremendo esfuerzo y mucha disciplina colectiva. Requiere un país que
tiene que estar consensuado sobre unos objetivos básicos. Lamentablemente,
cuando uno observa el tipo de discusión que se produce alrededor de estos
temas, no puede evitarse cierta decepción. El país no tiene un escenario
donde discutir esos temas, la tenaza de la polarización siempre nos atrapa. Algunos
creen que típicamente es una discusión de planificadores, donde todo se reduce
a proyecciones o peor aún uno se resuelve a fuerza de voluntarismo.
Pero quizás hay algo muy básico,
que deberíamos haber aprendido con mucha antelación, es la brecha de
financiamiento que debe cerrarse para garantizar un crecimiento sostenido. El
petróleo sencillamente no basta. La economía venezolana para crecer
necesita mucho más que el flujo de exportaciones petroleras. Y eso es
cierto cualquier proyección de precios más o menos razonable. Efectivamente
necesita petróleo, pero incluso para producir petróleo requiere de acceso a
financiamiento externo. Para países como Venezuela no hay crecimiento sin
financiamiento externo. Y los flujos de capital vienen en toda una variedad de
formas que tienen que ser accesadas de manera eficiente. No es posible
atraer financiamiento externo con esa estrategia del avestruz que básicamente
postulaba que se podía crecer sin recurrir al financiamiento externo, la
idea de que emitir deuda era más un asunto de política cambiaria que de manejo
de deuda. Pasada la ilusión del control de cambio, el problema no es evitar la
salida de capitales sino más bien permitir su entrada. El reto del crecimiento
comienza por atraer esos fondos, por tener una presencia activa en los mercados
de deuda. La reciente operación de cambio de Pdvsa pone en evidencia que no se
puede seguir de espaldas a los mercados voluntarios.Pdvsa, por ejemplo,
no puede seguir emitiendo sin volverse a registrar en el SEC (Securities and
Exchange Comission) tampoco Venezuela, por ejemplo, puede seguir evitando la
consulta de articulo IV del FMI. Son temas básicos sin los
cuales el acceso a los mercados se dificulta de forma infantil.
macroentorno@gmail.com
No hay comentarios.:
Publicar un comentario