jueves, 21 de diciembre de 2017

El triunfo del Chavismo (91 % de las alcaldías) y la peor crisis de la historia


Manuel Sutherland*
Centro de Investigación y Formación Obrera (CIFO)

El domingo 10 de diciembre fue un día muy interesante en Venezuela. En el medio de la crisis económica más fuerte en la historia moderna del país, el gobierno pudo asestar otro duro golpe a la moral de la oposición. De manera categórica el chavismo ganó el 91 % de los municipios y arañó el 70 % de los votos totales. Cabría preguntarse cómo y por qué se gesto una nueva victoria (la segunda en menos de 3 meses) en medio de semejante crisis y cuáles son las perspectivas para un futuro que se torna aciago para la clase obrera venezolana.

La peor crisis económica de nuestra historia
Infelizmente para los que acá vivimos, es menester decir que por cuarto año consecutivo Venezuela presentará la inflación (estimada en cerca de 1200 % para el año 2017) más alta del mundo, un déficit fiscal de dos dígitos (por sexto año consecutivo –al menos[i]–), el riesgo país a la inversión más alto del globo (JP EMBI+: 4626 puntos[ii] –El EMBI+ de Ucrania es de 437 puntos–), la cantidad de reservas internacionales más baja de los últimos 20 años (menos de 9,8 mil millones de dólares, el equivalente a menos del 15 % de las importaciones CIF del año 2012) y una tremebunda escasez de toda clase de bienes y servicios esenciales (alimentos y medicinas). El dólar paralelo (que sirve para fijar casi todos los precios de la economía) se ha incrementado en más de 2500 % en lo que va de año, lo cual ha desintegrado el poder adquisitivo por completo. 

Las estimaciones más moderadas afirman que desde 2013 hasta 2017 puede haber una caída acumulada del PIB de - 32,5%. Las estimaciones más conservadoras nos llevan a pensar que el PIB Per cápita para 2017 será tan bajo como el de 1961. Los números son tan abrumadoramente negativos que el gobierno se ha negado a publicar, el grueso de ellos, desde hace varios años. La economía de Venezuela jamás en su historia ha descendido por más de dos años consecutivos, a la fecha, con toda seguridad tendremos 4 años de decrecimiento consecutivo.[iii]

Según la firma “Econométrica” Venezuela entro en Hiperinflación el pasado mes de octubre registrando un incremento en los precios de 50,6 %[iv], con respecto al mes anterior. Primera vez en la historia del país que entramos en una situación tan penosa[v]. Antes del arribo del gobierno bolivariano, la inflación anual máxima que sufrimos fue de 103,2 %, en 1996[vi], ahora en sólo un mes hemos alcanzado la mitad de nuestra máxima inflación sufrida en un año. Los cálculos más cautelosos indican que la inflación en el mes de noviembre será más alta que la de octubre y que la inflación de diciembre debe superar con creces a su antecesora.

De manera extraña, para un gobierno que se precia de ser zurdo, la dirección del proceso bolivariano cree que debe pagar la deuda externa así no haya un solo dólar para importar vacunas o harina de trigo. De tal forma el gobierno ha desoído propuestas de muchos grupos (como nosotros) que esgrimimos la necesidad de una moratoria y atender las necesidades más elementales de una clase obrera ferozmente depauperada. Luego de caer en default parcial[vii] por el impago de un par de bonos (con vencimiento en 2019 y 2024) que alcanzan los 200 millones de dólares, el gobierno ha decidido reestructurar su deuda y llamar a una extraña reunión a sus acreedores. Como era de esperarse, los bonistas estadounidenses (cerca del 70 % del total de los tenedores de nuestra deuda) no vinieron a la reunión y la comisión nombrada por Maduro para tal negociación ni siquiera ofreció un plan alternativo de pagos, solamente ofrecieron un discurso ideológicamente centrado en las sanciones de Donald Trump y sus maledicentes secuaces. En tal sentido sólo se avanzó en reestructurar la deuda con Rusia (un 2 % de la deuda total).

Por más horripilante que parezca el tema económico, la máxima preocupación parece ser el desborde del hampa producto de la súbita conversión de millones de personas en población obrera (relativamente) sobrante para el capital. Más allá de la expansión del ejército industrial de reserva, la cuasi desaparición del aparato productivo ha impulsado un proceso de lumpenización estructural que empuja a millones a actividades cuasi delincuenciales o directamente delictivas. La policía está completamente desbordada y el ejército ha demostrado ser completamente inútil para combatir ese flagelo. Las cifras que algunas ONG publican (en ausencia de cifras oficiales) son realmente pavorosas.

En el sector salud parece ser más patente la implosión del proceso nacional de acumulación de capital. Sin tener espacio en este artículo para ello, es menester denunciar que el último boletín epidemiológico mostraba que 11.446 niños menores de un año habían muerto en 2016: un aumento de 30 % en solo doce meses. Un informe reciente de las Naciones Unidas y la Organización Panamericana de la Salud encontró que 1,3 millones de personas que antes podían alimentarse en Venezuela no han podido encontrar la comida necesaria desde que se desató la crisis hace tres años. Un asunto dramático que se refleja en centenares de personas hurgando en la basura para poder comer cualquier desecho y en miles de mendigos dolorosamente harapientos y hambreados[viii].

En el medio de semejante cataclismo la oposición que nuclea a casi toda la derecha antichavista (la MUD) debió frotarse las manos y preparar una campaña para una victoria cómoda. Sin embargo, ya sabemos que los resultados fueron otros…

Una pésima preparación electoral que anunciaba la derrota
“Veo al gobierno cumpliendo su plan de acabar con los opositores, los dispersó. Ahora va camino a una victoria en las municipales por forfait (inasistencia)”[ix]
Luís Salamanca

En el artículo anterior[x] dijimos:
“Aprovechando este tren electoral de triunfos, el chavismo planea adelantar la elección para Alcaldías para diciembre de este año. También tiene el plan de adelantar las elecciones presidenciales para marzo... “

Como vaticinamos, el gobierno aprovecharía su devenir “triunfador” para adelantar las elecciones y seguir asestando mazazos a sus opositores. Luego de una estrepitosa derrota en las elecciones a gobernadores (el chavismo ganó 18 de 23 gobernaciones) y de tímidos cánticos de fraude, la reacción de los tres partidos más importantes de la MUD fue declinar su participación electoral y llamar a la abstención. Acción Democrática, Primero Justicia y Voluntad Popular, devenidos (de pronto) en abstencionistas, dijeron que si participarían en las elecciones presidenciales. Algunos de sus voceros fueron ridiculizados por periodistas que decían: ¿Por qué abstenerse acá y no en las Presidenciales? ¿Cómo aseguran ustedes que las condiciones para las presidenciales cambiarán? Sus respuestas fueron sorprendentes: estamos guardando fuerzas para las presidenciales (¡), no tenemos recursos (¡) y vamos a luchar por mejores condiciones...

Aunque la MUD es habitualmente más vilipendiada por sus seguidores, que por los chavistas contratados para esa labor, la decisión de la MUD enfureció a sus acólitos. Por una parte los opositores más encarnizados decían que la MUD había entregado la lucha callejera y que no se habían comprometido a acompañar a los mártires opositores que murieron en una (anodina) lucha por defenestrar al gobierno. Cuando la MUD dijo que el camino era electoral y que todo lo demás era una aventura, los opositores más radicales enfurecieron. Cuando la MUD dijo que se iba a abstener “por ahora” se molestaron más aún. Para ellos, la MUD no lucha en la calle y ahora tampoco en las elecciones. La pregunta sería: ¿para qué sirve la MUD?

Los opositores más apegados a los valores democráticos y que se sonrojan por las aventuras golpistas de la MUD y por sus odiseas sanguinarias del tipo: Guarimba + Trancazo, que dejó alrededor de 150 muertes (incluyendo cerca de 20 personas quemadas vivas en linchamientos) y miles de heridos en una causa perdida, quedaron atónitos y francamente asqueados al enterarse que la MUD no iba a las elecciones. Ante la espantosa situación económica la propuesta de la clase política opositora fue la retracción, el gobierno se río de lo lindo.

Elecciones en una economía arruinada y la (doble) triada
“Los resultados anunciados por el Consejo Nacional Electoral (CNE) de las elecciones municipales no deben sorprender a nadie. Su explicación está en la incoherencia y falta de unidad de las fuerzas democráticas y por la arbitrariedad, manipulación y ventajismo del gobierno.”[xi]
Luís Longart Guerra

En las elecciones para alcaldes votaron 9.139.564 de personas, un 14,3 % menos que en las elecciones municipales de 2013 (casi un millón y medio de votos menos). La participación fue de 47 %, un poco baja para el entusiasmo electoral venezolano pero nada mal comparada con la abstención de 2005 en las elecciones municipales donde se abstuvo el 69 % del REP.

Según los inefables señores de Misión Verdad, el chavismo aumentó su votación en estas elecciones en 945 mil votos con respecto a las elecciones regionales de este año[xii]. La oposición bajó en 2 millones 103 mil en votos totales a nivel nacional[xiii]. El chavismo obtuvo 6 millones 517 mil votos (70%) y la oposición 2 millones 749 mil votos (29%). Más de 72 partidos obtuvieron votos, algo rara vez visto[xiv]. Así las cosas, el chavismo pasó de tener 204 alcaldías a erigirse con más de 308, o sea, aumentó en 50 % la cantidad de despachos obtenidos. La oposición en bloque apenas obtuvo 27 alcaldías de 335 en disputa.

El gobierno aprovechó el momentum político de la debacle de la MUD (que incluso luego de las elecciones a gobernadores se disolvió). En tales circunstancias la campaña electoral de tres semanas encontró a la oposición (de derecha y de izquierda) más atomizada que nunca. Artistas, periodistas, deportistas y cientos de opositores independientes se lanzaron al ruedo y fragmentaron los votos en candidaturas protagonizadas por personajes que desconocen la actividad política, por viejos políticos oxidados o por personas con escasos recursos y capacidades gerenciales. Por ende, en varios municipios donde históricamente triunfan, su división les jugó en contra y el chavismo en unidad monolítica venció. Lenin decía: un puño pega más que 5 dedos.

Cómo es de saberse, en elecciones municipales se potencia con extremo vigor el ventajismo y el uso obsceno (diríase, sicalíptico) de los recursos del estado por parte del partido del gobierno: el PSUV. De manera sintética se puede afirmar que el chavismo construyó una sólida unión entre partido-gobierno-estado-ejército. Los miembros que controlan de los mismos actúan como un cuerpo bajo un solo mando. Cuándo hay campañas trabajan como engranajes de una máquina, no es sólo que usan los recursos estatales como caja chica, sino que disponen de sus empleados, es decir, los convierten en propagandistas y agitadores proselitistas. Cierran oficinas y cambian horarios en aras de asistir a tareas de “apoyo electoral”. Es un gobierno que está en campaña los 365 días del año y todo el día, algo asombroso. El descuido administrativo es atroz (por la ineficiencia que conlleva), pero nada de eso importa, la prioridad es triunfar en las elecciones a toda costa.

A “La Triada” podríamos describirla en tres aristas:

1.       La engrasada maquinaria electoral del PSUV en franco maridaje con la distribución de prebendas clientelares.

2.      CLAPS, electrodomésticos, bonos, tickets de premio y un sin fin de productos fueron regalados a miles de familias que demostraban intención de voto bolivariana. A diferencia de otros procesos, los candidatos a alcaldes hacían los obsequios de manera directa y prometían que con más apoyo llegarían más dádivas.

En regiones rurales la dádiva es de las pocas formas de acceder a algún bien que aliviane una miseria vertiginosa. Lejos de parecer “populismo clientelar” para sus bases, las prebendas lucen como un esfuerzo sublime de un gobierno que entrega alimentos y mercaderías (generalmente importada) que la “Guerra Económica” impide obtener. De tal forma se solidifican los lazos ideológicos entre la honesta base chavista que cree que el gobierno hace “milagros” para ayudarle con alguna canonjía y la dirección que hace lo “posible” por hacerle llegar la gratificación estatal.

Quedó para la historia el post en Facebook de la flamante ganadora chavista de la Alcaldía Libertador de Caracas: “(…) Maduro habló de un regalo a través del carnet de la patria a los que voten. Sáquenle punta a eso.”

2. La aceitadísima maquinita de imprimir dinero inorgánico que produjo un aumento en la Base Monetaria emitida por el BCV para el período 1999-2017 (septiembre) de 490.091,80 % (la incrementaron en más de 4900 veces[xv]), lo que hace que virtualmente el gobierno tenga recursos infinitos y en cada elección dispare el gasto de manera exponencial.
De tal forma, el BCV simplemente le dirige “préstamos” a instituciones estatales contra pagarés, y esas instituciones ejecutan gastos que sirven para pagar miles de “prebendas” y campañas publicitarias sauditas. Con tan munificentes arcas, la cornucopia fluye en autos de lujo, casas y toda clase de objetos suntuosos (para los más cercanos al poder) y miles de estipendios que dimanan a micro espacios de poder donde organizaciones paraestatales administran, con absoluta discrecionalidad, unas migajas que en una situación de pobreza extrema sirven para mucho.

El correlato inflacionario de ésta política no le incumbe al gobierno. El dinero cuándo apenas se emite no pierde su valor por entero y sirve para hacer políticas electorales. Para quienes se quejan de la hiperinflación, el gobierno les lanza a sus intelectuales de choque, personas como Pascualina Curcio y Luís Salas, que tenazmente salen en TV diciendo que la emisión de dinero excesiva, no afecta en NADA a los niveles de precio. Es decir, que si imprimen billetes equivalentes a 20 salarios mínimos y se lo confieren a millones de sus adeptos, los precios no deberían subir.

A pesar de lo secreto del voto, muchos empleados públicos no afines al proceso son empujados a votar con un sinfín de presiones. Con otros controles aprietan tuercas a receptores de lolas sinecuras estatales y les dicen claramente: ¿Pero si te damos este “beneficio” como vas a votar en nuestra contra? ¿Quieres que ganen ellos y te quiten el “beneficio” que yo te doy? Si ellos ganan será como en la cuarta república cuándo nadie te daba nada. Si no votas por nosotros estás colaborando con el enemigo y no eres merecedor de la ayuda que te doy.

3. La postergación del ajuste macroeconómico sosteniendo subsidios del 99,99 % del precio de la gasolina, luz, transporte, agua etc.
Los servicios públicos que se obsequian empeoran día a día y debido a que las empresas no tienen como cubrir costos de mantenimiento, tienden a ser escasos, de muy mala calidad y eventualmente a colapsar. Aún cuando ha habido una inflación sideral, los precios de esos servicios siguen congelados. Por colocar un ejemplo, podríamos ver que una docena de huevos de gallina es más costosa que 2 gandolas de 30 mil litros (c/u) de gasolina de 91 octanos, una verdadera chifladura. Un ticket de metro para la ruta más larga equivale a 0,000032 dólares a precio de mercado paralelo.

Los precios verdaderamente ornamentales de servicios vitales, complementan un salario indirecto que es nada despreciable y que permite que los salarios en metálico sean extremadamente bajos. Muchos políticos y economistas ultraliberales hablan de ajustar drásticamente estos precios sin tan siquiera diseñar planes de compensación social. Dichas promesas asustan y alejan a personas que sumidas en la pobreza extrema no podrían pagar prácticamente nada, si su salario (más el bono alimentación), en términos del dólar paralelo equivale a menos de 4 dólares mensuales.

El cálculo del salario en términos del dólar paralelo es tremendamente inexacto. Distorsiona al extremo el cálculo del poder adquisitivo. Este artículo no tiene espacio para tratar ese tema, sin embargo, es de hacer notar que el salario más el bono alimentación (que no reciben los obreros informales, ni los pensionados) no alcanza para comprar –en un mes–: 3 pollos, o 4 kilos del queso más barato, o 2 kilos de jamón de espalda o 5 kilos de azúcar. Los obreros se ríen pensando que no pueden comprar ni 2 kilos de chuleta de cerdo en un mes y que una gallina al poner un huevo, gana más (salario, sin bono de alimentación) que un obrero trabajando 8 horas en un día. El gobierno ha sido exitoso en vender esa situación como una “guerra económica”, las lesivas sanciones de Trump y la UE les dan alas para reforzar una tesis disparatada e irracional. Cuando muchos obreros ven subir los precios se preguntan: ¿Hasta cuándo estos ladrones van a seguir subiendo los precios? El gobierno ha sembrado la matriz de que los precios deberían permanecer estáticos y que todo aumento es artificial: inducido, por razones de una conspiración política orquestada desde el imperio.
La expansión del gasto público clientelar funge como un igualador social muy eficaz y muestra un camino de ascenso social acelerado a quienes tan siquiera administren algún micro “provento” que el gobierno suelta, a través de las mil y un formas de clientelismo popular que ha diseñado con esmero y detalle.

Elecciones presidenciales y futuro político incierto
“Partido que no haya participado y haya llamado al boicot de las elecciones no puede participar más en ninguna elección…”[xvi]
Nicolás Maduro

Como lo hemos afirmado en el artículo anterior[xvii], la oposición desprecia el enorme poder político que puede desplegar “La Triada”. De manera dramática ha recogido los frutos de las desastrosas aventuras golpistas llamadas: guarimbas + trancazos, suerte de cortes de ruta con paramilitares y agresiones de todo tipo a personas que son (o parecen fenotípicamente) chavistas. Los saqueos y el vandalismo anarquista fueron vistos con horror por opositores que los sufrieron y decidieron abstenerse.

En tales circunstancias Maduro ha decidido desde ya lanzarse a las elecciones presidenciales como rutilante candidato del PSUV. De competir con una oposición de derecha y ultraderecha divida, elemento que pueden estimular comprando a varios candidatos con el rollizo peculio que manejan, podrían fácilmente ganar con un 30 % de los votos, en un ámbito de fuerte abstención y con candidatos desprestigiados como rancios carcamanes. Obviamente, el gobierno dispone de un caudal ilimitado de bolívares que podría imprimir sin problemas y repartir a sus más fieles clérigos, estos distribuirían hacia más abajo y con un sedoso efecto de goteo, podría caerle algo a millones de personas que en la inanición pura anhelan al menos un auxilio.

Parece que para la oposición de derecha la única vía es un outsider, un empresario exitoso en la extracción de plusvalía a la clase obrera, un maestro de la explotación, muy fuertemente mediatizado y con perfil apolítico. Este “mesías” se vendería como el gran gerente ajeno a la “politiquería” y con una sólida aversión a los politicastros. Un Macri venezolano parece la garantía de un proyecto derechista que busca competir con otra derecha de discurso antagónico y acción análogamente nociva a los estómagos obreros. La clase obrera y la izquierda socialista aún siguen siendo los convidados de piedra…

*Director del Centro de Investigación y Formación Obrera (CIFO)   
Correo: alemcifo@gmail.com            Página Web: https://alemcifo.wordpress.com
Caracas, 20/10/17


[i] Calcular el Déficit fiscal en Venezuela es sumamente difícil. Aunado a la negación del gobierno a publicar data, vemos un completo revoltillo en las cuentas nacionales criollas en las cuales se hace casi imposible saber cuánto ingresó y cuánto gastó el estado central y sus miles de instituciones, fondos, misiones y demás formas paraestatales de las cuáles no se encuentra ninguna información económica.
[ii] El Riesgo País (EMBI+ elaborado por JP Morgan) fue obtenido de la página Web: http://www.ambito.com , actualizado al domingo 17/12/2017.
[iii] Centro de Investigación y Formación Obrera, Crítica a las medidas económicas de los “guerreros económicos”: Salas, Boza, Valdés, etc. Portal: Economizando. Fecha de publicación: 03/10/17. Artículo disponible en: http://www.economizando.com.ve/critica-las-medidas-economicas-los-guerreros-economicos-salas-boza-valdes-etc/
[iv] Noticia: Econométrica: Venezuela entra en hiperinflación. Portal: El Estímulo. Fecha de publicación: 02/11/2017. Noticia disponible en: http://elestimulo.com/elinteres/econometrica-venezuela-entra-en-hiperinflacion/
[v] Ibídem.
[vi] Cevallos, Diego. Venezuela: Inflación totaliza 103,2 por ciento en 1996. Diario: Últimas Noticias. Fecha de publicación: 02/01/1997.  Artículo disponible en: http://www.ipsnoticias.net/1997/01/venezuela-inflacion-totaliza-1032-por-ciento-en-1996/
[vii] Noticia: Venezuela entra en default parcial de su deuda. Diario: El Nacional. Fecha de publicación: 14/11/2017. Noticia disponible en: http://www.el-nacional.com/noticias/economia/venezuela-entra-default-parcial-deuda_211559
[viii] Kohut, Meridith; Herrera, Isayen. La malnutrición que mata en Venezuela. Portal: New York Times. Fecha de publicación: 17/12/2017. Artículo disponible en: https://www.nytimes.com/es/interactive/venezuela-hambre-desnutricion-ninos-maduro/
[ix] Salamanca, Luís. Análisis de tres escenarios con unos comicios sin oposición en Venezuela. Portal: La patilla. Fecha de publicación: 31/10/2017. Articulo disponible en: https://www.lapatilla.com/site/2017/10/31/analisis-tres-escenarios-con-unos-comicios-sin-oposicion-en-venezuela/
[x] Sutherland, Manuel. ¿Por qué volvió a ganar el chavismo? Revista: Nueva Sociedad. Fecha de publicación: octubre de 2017. Artículo disponible en: http://nuso.org/articulo/por-que-volvio-ganar-el-chavismo/
[xi] Guerra Longart, Luis. Análisis electoral municipal. Diario en línea: El sol de margarita. Fecha de publicación: 12/12/2017. Artículo disponible en: http://www.elsoldemargarita.com.ve/posts/post/id:201324
[xii] Habría que decir que en Caracas no se votó en las elecciones regionales pasadas, eso le restaría cerca de 400 mil votos a los cerca de 900 mil votos adicionales.
[xiii] Noticia: El chavismo arrasa en elecciones municipales. Portal: Misión verdad. Fecha de publicación: 11/12/2017. Articulo disponible en: http://misionverdad.com/LA-GUERRA-EN-VENEZUELA/el-chavismo-arrasa-en-las-municipales-15-factores-claves-de-una-victoria
[xiv] Ibídem.
[xv] Índices financieros. Banco Central De Venezuela. Página web.
[xvi]  Algarra, Álvaro. Análisis de las elecciones Municipales. Diario en línea: Voanoticias. Fecha de publicación: 11/12/2017. Artículo disponible en:  https://www.voanoticias.com/a/venezuela-elecciones-municipales- /4157367.html
[xvii] Sutherland, Manuel. ¿Por qué volvió a ganar el chavismo?...

miércoles, 20 de diciembre de 2017

Venezuela, sanciones internacionales y criptomoneda


Tomado de www.prodavinci.com


ECONOMÍA

POR Laura Rojas

12/12/2017

El presidente Nicolás Maduro informó que el gobierno crearía su “propio sistema de criptomoneda, el Petro”. Esa moneda digital estaría respaldada por las reservas de petróleo, gas, diamantes y oro del país. El presidente anunció el Petro como un ejercicio de soberanía, una fórmula para eludir el “bloqueo financiero internacional” y “para buscar nuevas formas de financiamiento”, lo que se interpretó como una manera de eludir las sanciones internacionales impuestas por otras naciones contra su gobierno.

¿Qué son las criptomonedas?

Las criptomonedas son monedas emitidas de manera privada, sin la intervención de instituciones financieras o de una autoridad central, y aceptadas solamente por los miembros de una comunidad virtual específica. Bitcoin, por ejemplo, fue creada en 2008 por Satoshi Nakamoto, un experto en programación que registró el dominio bitcoin.org y que dio a conocer al mundo los códigos en que basó su innovación. Nadie sabe si Nakamoto es una persona o un grupo de personas y su verdadera identidad sigue siendo un misterio, pero lo cierto es que para 2010 había logrado convencer a varias personas de aceptar su moneda a cambio de procesar las transacciones. En los últimos 7 años, Bitcoin ha pasado a ser un activo financiero de gran atractivo para muchas personas y es aceptada como medio de pago por un creciente número de organizaciones, pero en comparación con el dinero “de curso legal” (dólar, euro, bolívar), todavía tiene un uso restringido [1].

Existen cerca de mil otras criptomonedas en todo el mundo, pero las seis más ampliamente aceptadas (no en orden de importancia) son Litecoin (LTC), Ethereum (ETH), Dash, Ripple (XRP) y Monero (XMR).

¿Cuál es la innovación detrás de las criptomonedas?

Para entender el interés en las criptomonedas es importante establecer las diferencias con otros instrumentos de pago.

Usando criptomonedas, las transferencias de dinero pueden ser más rápidas, más baratas y sin la participación de terceros, tanto a nivel nacional como internacional. La tecnología subyacente es el blockchain, la cual se sustenta en la criptografía, de allí viene el nombre de criptomonedas. El blockchain –o cadena de bloques– es como un libro de contabilidad (ledger en inglés) o una base de datos virtual, es decir, una lista de cada transacción y cada propietario de la criptomoneda.

El blockchain permite que el proceso de transferencia de dinero se materialice en un solo paso, la liquidación, al igual que cuando se usa dinero físico. Con monedas y billetes, pagador y cobrador tienen que estar en el mismo espacio para liquidar la transacción, mientras que con una criptomoneda la liquidación puede realizarse de manera remota, en el mundo digital, pero de forma igualmente instantánea. Además, con el blockchain no se necesitan más participantes que los que van a intercambiar la moneda, el pagador y el cobrador, cada uno de los cuales posee una llave e identificación personal que solo ellos conocen. La información se registra en los bloques que luego se unen entre sí y la información se transfiere a todos los bloques de manera encriptada vía Internet. No se comparte información personal, aunque si se crea un registro de la transacción, por lo que las mismas no se consideran totalmente anónimas. Esta característica reduce las posibilidades de robo de identidad y fraude.

Compare con el proceso para pagar o transferir dinero con otros instrumentos de pago electrónicos, sean tarjetas (de crédito, débito, y prepago), transferencias o billeteras electrónicas. La decisión del pagador desencadena una secuencia de mensajes digitales entre varias instituciones para verificar que la persona es quien ha emitido la orden y tiene los fondos a ser transferidos. Dependiendo del instrumento, el proceso involucra a procesadores, intermediarios estilo PayPal, empresas de telecomunicaciones, bancos, las redes internacionales de tarjetas como MasterCard o Visa y las cámaras de compensación. Al final, la operación conduce a un movimiento de dinero entre las cuentas bancarias del pagador y del receptor del dinero y son los bancos centrales quienes registran ese movimiento en una base de datos centralizada conocida como sistema de liquidación. Es un proceso con múltiples puntos de fricción, con altas probabilidades de fraude y abuso. Un problema con alguno de los participantes, especialmente con los bancos, puede paralizar por completo el proceso de pagos.

¿Quién emite las criptomonedas?

Las monedas de curso legal son emitidas por los bancos centrales de acuerdo con sus objetivos de política monetaria. En el caso de las criptomonedas, la figura del banco central es reemplazada por los protocolos de computación que gobiernan la cadena de bloques de la criptomoneda específica.

La cadena de bloques es descentralizada y se basa, entre otras cosas, en una red de computadoras que sincroniza las transacciones con un proceso llamado minería, manejadas, naturalmente, por “mineros”. Los mineros son todos son iguales entre sí, es decir, no existe uno que actúe como coordinador o administrador de la cadena, no hay jerarquía alguna en la cadena. Cada vez que alguien inicia una transacción con la criptomoneda, los mineros compiten entre si para resolver una especie de “acertijo” matemático y así validan la transacción. Si es aceptada por todos, se crea un nuevo bloque que actualiza toda la base de datos en la cadena.

Aquellos mineros que son exitosos y pueden mostrar la “prueba de [su] trabajo” reciben una recompensa en forma de nuevas criptomonedas, 25 en el caso de Bitcoin. Cada cuatro años disminuye el número de Bitcoins dadas en recompensa, de manera que el número total de criptomonedas emitidas no supere los 21 millones. Sin embargo, otras criptomonedas pueden ser emitidas sin límite.

¿Cómo se determina el valor de las criptomonedas?

Las criptomonedas no tienen un valor intrínseco, este depende del mercado, es decir, de la comunidad de personas que está dispuesta a creer que tienen un valor. No tienen ningún tipo de respaldo en términos de metales preciosos o de otro tipo, ni lo necesitan para ser valoradas por esa comunidad. En ese sentido se comportan como las monedas de curso legal. Por años, el valor de la mayoría de las monedas se fijaba con relación a las reservas de oro depositadas en los bancos centrales y eran convertibles, es decir en teoría se podía obtener oro a cambio de ellas. Ese sistema de tasas fijas y convertibilidad colapsó en 1971.

Desde entonces, el valor de una moneda está basado en un consenso social, fundamentado en la confianza de las personas en la solvencia del gobierno y las políticas del Banco Central. Cuando se pierde esa confianza, como ha sucedido en los casos de países con hiperinflación, como Venezuela o Argentina en el pasado, la moneda pierde valor y las personas comienzan a demandar la moneda de otro país. También pueden demandar criptomonedas.

El valor monetario o precio de las criptomonedas se expresa en referencia a su tasa de cambio con monedas de curso legal. Así, se dice que el Bitcoin alcanzó en promedio un precio de US $14.000 dólares en los últimos 7 días, o de UE € 11.000 en euros y así en otras monedas. El precio de Bitcoin en particular ha fluctuado enormemente desde que se adquiría por cinco centavos de dólar en 2009, con períodos en que sube mucho, como el actual, y períodos en que desciende. Aunque parezca contra intuitivo, no hay indicación de que el movimiento observado en el precio de Bitcoin esté correlacionado con los movimientos del dólar u otras monedas [2]. Una explicación es que son mercados totalmente separados y las criptomonedas monedas no son realmente sustitutas del dinero corriente, al menos hasta ahora.

El precio de una criptomoneda fluctuará dependiendo de que tanto la gente quiera comprarla frente al número de personas que quieran adquirirla en un día en particular. En un modelo muy simple, la demanda de criptomonedas depende de cuantas personas las quieren como medio de pago y cuantas como activo, es decir, como inversión. Pero subyacente hay otros factores que impactan la demanda: el número de personas con conocimiento de las criptomonedas, la facilidad y la seguridad con la que pueden comprarse/usarse, el número de negocios que aceptan las monedas como medio de pago, la reputación de la moneda (si ha sido hackeada o el gobierno ha intervenido las plataformas de cambio, o facilita su uso). La demanda especulativa por monedas como el Bitcoin, también se alimenta de la historia del precio y las expectativas sobre el mismo.

La oferta es una función de cuántas monedas hay en circulación, pero mientras más personas quieran una criptomoneda para inversión, menos de ellas habrá en circulación. Esto parece ser una de las causas que está empujando el precio de Bitcoin hacia arriba.

¿Cómo pueden comprarse criptomonedas y dónde se almacenan?

Toda criptomoneda puede comprarse usando dólares, euros u otras monedas, en una plataforma de cambio virtual o directamente de un propietario de las monedas. En muchos países operan cajeros automáticos. También se obtienen como pago por bienes o servicios. Como se explicó, los mineros obtienen criptomonedas cuando han resuelto los acertijos y verificado las transacciones. También pueden venderse criptomonedas, si se encuentra comparador. En la práctica, solo las más conocidas son cambiadas por dinero tradicional.

Hay muchas plataformas de cambios. Coinbase es la más conocida para Bitcoin, pero hay muchas otras como BTCChina, Bitstamp, Bitfinex. Surbitcoin y Criptobuyer son dos de las plataformas para cambio de bitcoins en bolívares. Las monedas virtuales tienen una tasa de cambio respecto a las monedas de curso legal, pero las criptomonedas se almacenan en billeteras digitales o cuentas que solo existen en la nube o en las computadoras de las personas. También hay empresas de servicios de pago que se dedican a ayudar a los negocios a recibir Bitcoin por la venta de productos y cambiarlos por moneda de curso legal.

¿Puede el gobierno de Venezuela crear una criptomoneda?

La respuesta corta es que sí; es posible. En la actualidad cualquier persona puede crear una criptomoneda, el conocimiento para hacerlo está disponible y por eso hay tantas en la actualidad. Sin embargo, así como aparecen nuevas criptomonedas casi todos los días, así mueren la mayoría de los proyectos, incluso después de haber atraído grandes cantidades de dinero de inversionistas privados [3]. Así que vale la pena preguntarse ¿cuáles son los factores que hacen posible el éxito de un proyecto como el Petro? [4]

Tres factores son los cruciales:

1. Primero, escribir los códigos de programación sobre los que se construiría la cadena de bloques del Petro. Eso no es imposible ni tan difícil, es la parte más fácil de todo el proyecto. Casi todas las criptomonedas están basadas en un programa de código abierto que deriva del original de Bitcoin y que está disponible en varios sitios en Internet, GitHub entre ellos [5]. Pero al ser la infraestructura de la cadena, el código debe ser ultra seguro frente a ataques cibernéticos. En 2016, DAO, una moneda derivada de Ethereum y usada como base para contratos inteligentes, logró atraer US $168 millones en inversión en un año. Pero el proyecto fracasó después de un ataque de hackersque hizo que se perdieran $50 millones de dólares en contratos, mandando al subsuelo el precio de la criptomoneda [6].

2. Segundo, hay que convencer a varias personas que se conviertan en mineros. Recordemos que sin mineros no hay nueva emisión de criptomonedas. En otros proyectos, los primeros mineros han sido las personas más convencidas del éxito de la criptomoneda, razón por la cual han estado dispuestos a recibir esas monedas digitales, aún si su precio actual es bajo y la demanda por ellas es casi inexistente.

Según reportan publicaciones extranjeras [7] existe una cantidad creciente de mineros de criptomonedas en Venezuela, lo cual no es sorprendente. El bajo precio de la electricidad garantiza bajos costos de producción en comparación con otros países (hay que señalar, sin embargo, que el mal funcionamiento de la red eléctrica puede erosionar por completo esa ventaja del precio).

El gobierno venezolano podría tratar de montar su propia red de minería o puede intentar convencer a los mineros de procesar el Petro. A menos que use funcionarios públicos, deberá diseñar los incentivos apropiados para los mineros, siendo el más importante la expectativa de que eventualmente los Petros adquieran valor y puedan usarse para comprar ciertos bienes y servicios.

  1. El último factor, y el más importante, es construir la confianza entre los potenciales usuarios de la criptomoneda, es decir convencer a individuos y organizaciones de aceptar la nueva moneda digital. Algunos señalan que lo que se necesita es construir un ecosistema con varios participantes: programadores, inversionistas, comercios, servicios de procesamiento de pagos y personas interesadas en usar esos servicios [8]. La construcción de ese ecosistema puede tomar muchos años, aún para una organización con credibilidad, lo cual no es el caso del gobierno de Venezuela. Para muestra, el caso de Bitcoin es interesante: para 2015 menos de la mitad de la población adulta de Estados Unidos sabía de su existencia, y solo un poco menos del 1% la había adoptado/comprado. Y aunque un creciente número de organizaciones aceptan hoy en día Bitcoin como medio de pago, el porcentaje es casi irrelevante en términos del volumen de transacciones que se genera en toda la economía [9].
El presidente Maduro anunció que el Petro estará respaldado por las reservas de petróleo, gas y oro. Eso supone establecer una formula creíble, mediante la cual una unidad del Petro sea equivalente a un monto “X” de esas reservas. Esas reservas deberán mantenerse intocables y separadas del resto de la economía y, en especial, cualquiera que tenga un Petro tendrá derecho a que le den su porción de esas reservas. Eso no es factible, obviamente. La medida anunciada no es sino un intento de darle a la criptomoneda la credibilidad que el gobierno no tiene.

¿Pueden usarse las criptomonedas para evadir las sanciones internacionales?

Definitivamente sí, y por eso países como Rusia e Irán han mostrado interés en la minería de criptomonedas, especialmente en Bitcoin; hackersde Corea del Norte han tratado de robar criptomonedas de su vecino del sur. Incluso Rusia, como Venezuela, ha hablado de crear su propia criptomoneda [10], en un intento de establecer su autonomía frente al dominio del dólar.

En realidad, no es indispensable que estos países tengan su moneda propia para evadir las sanciones. Las personas afectadas pueden utilizar Bitcoin u otras criptomonedas para transferir fondos al exterior de manera anónima y sin tocar el sistema financiero de Estados Unidos o Europa. Es posible también que puedan hacer compras a ciertas empresas. Sin embargo, la posibilidad de que los sancionados puedan financiarse en moneda de curso legal por medio de las criptomonedas es más limitada. Cada vez más países (EU, Alemania, Canadá, Gran Bretaña) monitorean a las empresas que administran las plataformas de cambio y las billeteras y las obligan a cumplir con las medidas relativas a lavado de dinero, financiamiento al terrorismo, e ilícitos financieros. Una de esas medidas es lo que se conoce como “Identifica a tu cliente” —Know your Customer(KYC)—, que exige verificar la identidad del cliente, evaluar su riesgo y reportar cualquier tipo de conducta que se considere sospechosa. También requiere reportar a las autoridades cualquier transacción mayor de US$ 10.000 dólares. Varias plataformas han sido sancionadas o cerradas por no cumplir con esas regulaciones y los administradores han ido a prisión por evadirlas. Por otro lado, en la ley americana que impuso nuevas sanciones a Rusia, Irán y Corea del Norte, aprobada en agosto 2017, se incorporó un mandato para que el Departamento de Seguridad Nacional (Homeland Security) presente al Congreso una estrategia completa sobre la relación entre criptomonedas y los ilícitos financieros. La ley establece, además, que los países sancionados colaboren en recabar la información relativa a ilícitos financieros, incluyendo las transferencias con criptomonedas [11]

Notas
[1] Garrick Hileman y Michel Rauchs: The Global Cryptocurrency Benchmarking Study. Cambridge Centre for Alternatve Finance. Universidad de Cambridge. Gran Bretaña, 2017
[2] Denis Harrinson: Here´s how fiat money affects bitcoin price
[3] Evan Faggart: The Top 5 Cryptocurrency Failures of All Time. Bitcoin News. Septiembre,2016 http://bitcoinist.com/cryptocurrency-failures-all-time/
[4] En el análisis asumimos que se trata de una nueva criptomoneda y no una versión digitalizada de la moneda nacional distribuida utilizando la tecnología blockchain. La diferencia es importante. En la actualidad algunos bancos centrales, entre ellos los de Rusia, Inglaterra y Estados Unidos están estudiando crear su propia criptomoneda, pero denominada en moneda tradicional. Ver, por ejemplo, John Barrdear and Michael Kumhofhttps: Macroeconomics of Central Bank issued digital currencies Working Paper No. 605. Bank of England. July 2016
[6] Evan Faggart: The Top 5 Cryptocurrency Failures of All Time. Bitcoin News. Septiembre,2016 http://bitcoinist.com/cryptocurrency-failures-all-time/
[7] a. Rene Chun: Big in Venezuela: Bitcoin Mining. The Atlantic Magazine. Septiembre, 2017 https://www.theatlantic.com/magazine/archive/2017/09/big-in-venezuela/534177/
  1. Jim Epstein. The Secret, Dangerous World of Venezuelan Bitcoin Mining. How cryptocurrency is turning socialism against itself. January 2017. http://reason.com/archives/2016/11/28/the-secret-dangerous-world-of
[8] Arvind Narayanan y otros: Bitcoin and Cryptocurrency Technologies. Princeton University Press, 2016
[9] Scott Schuh y Oz Shy: U.S. Consumers’ Adoption and Use of Bitcoin and Other Virtual Currencies. Federal reserve Bank of Boston y MIT. Mayo, 2016
[10] Laura Shin: Why Cryptocurrencies cCould Push The Dollar From World Reserve Currency Status. Forbes. Noviembre, 2017. https://www.forbes.com/sites/laurashin/2017/11/07/why-cryptocurrencies-could-push-the-dollar-from-world-reserve-currency-status/#4e194f2a6a9e
[11] Nathan Reiff: U.S. Demands International Monitoring of Cryptocurrency Transactions. Investopedia. Agosto, 2017. https://www.investopedia.com/news/us-government-demand-monitoring-cryptocurrency-transactions-trump-senate-bill/