MANUEL FELIPE
GARAICOECHEA
A pesar de la natural tristeza por su reciente deceso,
escribo esta nota con la alegría de haberlo conocido. Manuel Felipe, lo nombraba siempre su esposa Mercedes. A la par de todo, fue siempre un hombre de familia.
Muchos momentos conversamos sobre sus andanzas con hijos y esposa en Europa y
Chile, donde hizo varios estudios sobre su
tema fundamental: el desarrollo.
La primera vez que oí hablar de él fue a finales de los
setenta, cuando alguien de palabra fácil dijo: ese profesor tiene una especie
de Kaleckimania, refiriéndose a una
especie de obsesión que le atisbaba con las ideas del economista Michal Kalecki. De sus estudios en
Polonia, efectivamente, le quedaron influencias de este economista Polaco.
Varios me dijeron que había sido de joven muy inteligente; y Héctor Silva Michelena, me dijo alguna
vez: “es uno de los mejores”. En el lado
técnico y conceptual, en varios momentos de la vida pasamos largos ratos
conversando sobre asuntos del desarrollo y en todos se veía su agudeza y aporte
en tales menesteres. Igualmente, pude observarle un detallado conocimiento de
los estilos y procedimientos en la UCV.
Los avatares de la vida lo hicieron, en momentos, apartarse
un poco de la academia, pero siempre, junto a otros profesores del área de los
postgrados de la Facultad de Economía de la UCV, le recordamos –tal cual se destacó en un
reconocimiento que se le hizo- sus valores y capacidades y hasta los tiempos
más recientes vimos en él un batallador
de la abnegación por la docencia y la enseñanza, a pesar de las difíciles
condiciones que terminó observándole a tales labores. Un héroe verdadero de los que la Universidad (–la UCV- a la que le dedicó parte importante de su larga vida, en
numerosas actividades como, entre otras, la de Director de la Escuela de Economía
o miembro del Postgrado de Economía Internacional), a la par que profesores y
estudiantes, sacó y obtuvieron beneficio, por su pasión, inteligencia y vida.
Eduardo Ortiz Ramírez
1 de octubre 2023.
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