Trump y el Resurgimiento del
Nacionalismo
Por Alfredo Ordóñez López
La victoria de Donald Trump en la
presidencia de los Estados Unidos de América ha generado diversas posiciones políticas,
económicas y hasta de carácter social en el mundo, pues el nuevo anfitrión de
la Casa Blanca a partir del 20 de enero de 2017, tendrá el deber
no solo de ser el Presidente de un país sino también un líder mundial.
Sin embargo, y tomando en cuenta el
discurso político usado en la dinámica electoral del Sr, Trump, se puedo
destacar dos aspectos claves de lo que será la nueva visión de la política. El
primero se refiere a la idea de presidir para los norteamericanos y no para el
mundo, y el segundo se sustenta en el posible aislamiento de la política
internacional en los conflictos internacionales y llevarlos más a temas de
carácter económico.
Tanto el discurso nacionalista y
como esa posición “machista” frente a las mujeres, calaron en los
sectores menos urbanos de la población norteamericana, nos referimos al sector
agrícola, el pequeño comerciante, los trabajadores clase media de empresas,
entre otros (quienes siempre son la mayoría en cualquier país), y que se han sentido
perjudicado por las políticas de libre comercio y la construcción de un nuevo sistema
social en donde la visión del feminismo, la diversidad sexual, los derechos humanos
han jugado un papel clave en la Construcción de una nueva sociedad americana.
De tal manera que la llegada de
Trump refleja claramente el resurgimiento de un nacionalismo americano
estadounidense aparentemente olvidado, en que el líder sea quien mejor represente
al Tío Sam, el Águila Calva, un hombre prospero, patriótico, autosuficiente, y
formado a base de un honor nacional.
La nueva situación política que se
presenta, está inmersa en una dinámica internacional muy particular, pues
después de los acontecimientos presentados en Ucrania (2014), y la posición de
“hombre fuerte” del presidente Ruso, Vladimir Putin, lo cual representó políticamente
y socialmente el renacer del sentimiento soviético en toda Eurasia. Además, la
salida del Reino Unido de la Unión Europea (BREXIT) por decisión nacionalista de
su población vía Referéndum, pronostica una reconfiguración en el escenario
internacional, en si estaríamos en una nueva fase de equilibrio de Poder.
Difícilmente, el Congreso de los
Estados Unidos de América (con mayoría republicana) permitirá que Trump se aísle
de los problemas de “interés nacional” para EE.UU en el mundo; pero lo que sí
estará latente es el regreso al proteccionismo y al conservadurismo de la
política económica en pro de los interés locales; lo que pudiera generar un
impacto severo en las empresas globales, pues estas empresas funcionan en
varios países y el libre comercio representa su ventaja competitiva frente al mercado
internacional. Asimismo, las inversiones extranjeras directas (IED) podrían
girar a mercados más confiables con la dinámica global como la U.E Asia y hasta
la misma Rusia.
Este posible escenario podría ser
aprovechado por los países que América Latina si se enfocan en estabilizar sus
sistemas políticos y económicos para atraer IED y lograr la conformación de
espacios geográficos productivos (Tecnopolis – Clúster - Asociatividades –
Aglomerados Industriales) que permitan diversificar el perfil productivo de las
naciones, a base de procesos de transferencia tecnológica e innovación.
Quisiera saber si esta abierta la maestría este año. Gracias
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